Yoga no es solo una práctica física, es una filosofía que implica equilibrio entre cuerpo, mente,
espíritu en todas las facetas de nuestro ser. Si eres nuevo en el mundo del yoga, puede parecer
abrumador al principio, pero no te preocupes. Aquí te dejo unas nociones básicas para
ayudarte a dar tus primeros pasos(adentrarte) en esta fascinante disciplina.
1. Comienza con la Respiración consciente: Pranayama.
Antes de cualquier postura física, prueba a familiarizarte con la respiración consciente.
Simplemente date cuenta del acto de respirar. Puedes sentarte cómodamente, con la espalda erguida observando el acto de inhalar y exhalar. Solo por atender a tu respiración, ésta se vuelve más natural y espontánea. La respiración consciente calma tu mente y prepara el terreno para una práctica más profunda.
2. Posturas de yoga: Asanas.
“Asana” en Sanscrito significa postura, aquí tienes tres posturas que puedes practicar en una clase de yoga:
TADASANA (Postura de la montaña): estando de pie en una posición neutra, columna elongada y respiración consciente. Posición de enraizamiento y equilibrio.
BALASANA (Postura del niño): sentándose con las nalgas hacia los talones con el torso y los brazos en el suelo. Posición de flexión, de recogimiento, excelente para soltar la espalda y los hombros
ADHO MUKHA SVANASANA (Postura del perro boca abajo): Desde cuadrupedia, elevando la pelvis hacia arriba y atrás, alargando brazos y piernas formando una “V” invertida.
3. Meditación:
la práctica de yoga físico o hatha yoga es una meditación en movimiento.
Es la antesala de una meditación sedente, que puedes hacer en cualquier momento y también al principio y /o al final de tu sadhana o practica de yoga, enfocándote en tu respiración con el objeto de detener las fluctuaciones mentales.
4. Establece una rutina diaria:
la clave es la constancia.
Intenta practicar al menos 15-20 minutos al día. Puedes incluir una combinación de movimiento consciente y/o asana, pranayama y meditación. Prueba a experimentar y disfrutar también de tu autopráctica. Y para tus clase guiadas encuentra un centro en el que te sientas a gusto, seguro y te haga vibrar lo que tú eres.
5. Escucha a tu cuerpo y tus sensaciones:
Sin exigirte demasiado.
Es vital la autoescucha, la autoindagación desde la no violencia (Ahimsa) ¿Estas dispuesto a hacerte daño por hacer cosas para las que tu cuerpo no está disponible en este momento? No se trata de competir, ni contigo, ni con nadie. Se trata de honestidad, aceptación e indagación.
6. Utiliza los soportes que necesites:
Apoya tu aprendizaje
Sin miedo de usar bloques, cinturón, bolster o silla. Todos estos soportes pueden ayudarte a mantener una postura adecuada para ti y tus necesidades, mientras aprendes e integras lo aprendido.
7. Celebra tu progreso:
Cada paso es importante. cuenta
El camino del yoga es personal único para cada individuo. Celebra cada descubrimiento, no te preocupes por la perfección ya que no existe. Yoga es un proceso continuo de autodescubrimiento y crecimiento así que: ¡Disfruta del camino!